Carta a Siria

Niña:

Yo no te odio niña, eso debes entenderlo, aunque las bombas que destrozan tu casa y cortan tus sueños tienen mi nombre escrito. Yo no te odio niña, aunque el soldado que asesina a tus padres y hermanos parece tener mi cara. Yo no te odio niña, aunque el fuego que arrasa tu ciudad tiene mi firma; yo no te odio niña.

     No soy yo niña el que arroja bombas, asesina e incendia, aunque es en mi nombre que el poderoso dice hacerlo. Pero en realidad tampoco es en mi nombre; ese es a penas su pretexto. Porque el poderoso niña, solo emplea mi cara, mi nombre y mi firma; me usa como excusa. En ese sentido soy también un poco victima, porque al asesinarte en mi nombre, me asesina un poco también.

     Pero es que el poderoso no puede confesar sus verdaderos motivos, eso también debes entenderlo niña; todos conocemos la causa de tu muerte, pero no la oirás en boca del poderoso.

     Porque el poderoso tampoco te odia niña, sobretodo eso debes entender, para él no existes. Sólo eres un pequeño precio, una consecuencia inevitable, un número más en un mar de ellos; una pieza en el juego del Poder. De eso se trata niña, de Poder; el poderoso quiere más Poder, sólo es eso.

     Pero usa mi nombre de pretexto niña y si me quedo callado, también yo te asesino. Por eso yo y otros como yo, gritamos que no es nuestro nombre, por eso debemos detenerlo; para que mañana otra niña no muera en nuestro nombre.

Mario Stalin Rodríguez

Nota:

Las próximas semanas, por cuestiones calendáricas, habrá más posteos que los habituales:

Miércoles 11 a las 00:00 Hrs. exactas, porque hace tres años, el mundo cobró un poco más de sentido.

Jueves 12 a las 00:00 Hrs. (más o menos), actualización normal.

Lunes 16 a las 00:00 Hrs. exactas, porque hace dos años estaba yo, tranquilamente, tomando una ducha.

Jueves 19 a las 00:00 Hrs. (más o menos), actualización normal con el capítulo 11 de LOV-D&D.

Viernes 20 a las 00:00 Hrs. exactas, porque hace poco más de dos años la perdimos y aún somos ella.

Por lo demás, acá andamos celebrando un primer aniversario, regalando hutopuntos.