CAMBIOS

El tiempo pasa, dice la canción; y nos vamos poniendo viejos... Y será que no es tanto el tiempo, sino el camino recorrido, el cómo lo hemos recorrido y con quienes y de quienes nos vamos acompañando.

            Y será que, al menos en esa última parte, he tenido la suerte de contar con la compañía de las mejores personas... Algunas de ellas por largos trechos, otras por cortos y algunas más por todos los lapsos intermedios.

            Algunas se han marchado tan rápido como llegaron, otras permanecieron por largo tiempo y desaparecieron... Algunas más parecen distantes, pero de alguna manera siguen ahí y, aunque no lo parezca, seguimos caminando lado a lado.

            Y de todas ellas, de cada una en su particular manera y con su debido gradiante, he aprendido cosas sobre cómo recorrer o no este camino... Incluso en estas circunstancias, en donde la distancia es imperativa para el querernos, voy aprendiendo de todas las compañías pasadas y presentes, constantes, efímeras o esporádicas, el cómo recorrer o no este camino.

            Y será por eso que, llegando al cuarto escalón del cuarto piso, sólo puedo agradecer a todas las personas con quien he recorrido este camino, justamente, por el camino recorrido...

Mario Stalin Rodríguez