Los Falsificadores de la Democracia 14
¿VICTORIAS?
Pasada la tormenta electoral y conforme se
asienta el polvo de las tolvaneras, es posible vislumbrar el panorama político
de México para los próximos años y, si bien éste se antoja complicado, no lo es
ni mucho menos en el sentido que LosContrapeso pretendían.
Además
de una victoria más simbólica que real, al obtener 9 de 16 alcaldías de la
Ciudad de México (pero no la mayoría en el congreso local, por lo que no podrán
impulsar ninguna reforma legal ni influir en la asignación del presupuesto en
la capital del país), la forzada alianza “Va Por México” tiene poco que
celebrar, pues no logró hacerse del control de la Cámara de Diputados, que era
su objetivo principal para poder controlar el presupuesto de los próximos años
y ahorcar económicamente los proyectos de la administración federal, además de
restaurar programas tan ineficientes como abiertos a la corrupción, como el
Seguro Popular o las Instancias Infantiles, y diversos fideicomisos a través de
los que malversaban recursos públicos, que desaparecieron en la actual
presidencia.
Lejos
de ello, los números obtenidos por los partidos que se arroparon bajo la figura
de Claudio X. González (PAN, PRI y PRD), no les permitirán impulsar ninguna
iniciativa legislativa por su cuenta, ni estorbar la aprobación de leyes y
presupuestos, ni siquiera suponiendo que lograran recuperar para su alianza a
los legisladores obtenidos por Movimiento Ciudadano.
Podrán
hacerlo, sí, para la aprobación de posibles reformas constitucionales
(necesarias para consolidar la recuperación de, por ejemplo, el mercado
energético) y, sobre todo, en la elección del próximo Consejero Presidente del
INE en 2023 (que estaría encargado de organizar las elecciones presidenciales
del siguiente año), pero no imponer una figura a modo para ellos, como sí lo
fue Lorenzo Córdova, el ÁrbitroImparcial que volcó el aparataje electoral a
favor de los partidos del entonces “Pacto por México” en 2015, 2018 y este año
(con resultados, cuando menos, insuficientes para los intereses que lo
colocaron en el puesto).
Fuera
de ello, los resultados que obtuvieron en las gubernaturas en disputa no pintan
un panorama halagüeño para el “bloque opositor”, pues al perder el congreso de Tamaulipas
y las gubernaturas de Michoacán, Colima y Nayarit ante Morena, se desdibuja por
completo la llamada “Alianza Federalista” (ya herida de gravedad al no
concretarse la alianza electoral entre el bloque del PRI-PAN-PRD y Movimiento
Ciudadano, lo que agrega otro clavo al ataúd del grupo de gobernadores, pues en
Nuevo León el gobernador Jaime Rodríguez, será sustituido por el juniorcito
Samuel García, emanado del partido naranja).
En
este panorama, no sería difícil que incluso en las cámaras legislativas la
alianza opositora terminara por diluirse, provocando que cada bancada partidista
buscara sus propios intereses, llegando a negociar con el bloque mayoritario
para la aprobación de aquello que necesite la mayoría cualificada (lo que, de
hecho, ya ha ocurrido en algunas ocasiones en la saliente legislatura, en la
que el partido gobernante tampoco contaba con las dos terceras partes de las
cámaras legislativas).
No, el panorama de los siguientes años no
será sencillo para la administración de López Obrador, pero lo será aún menos
para LosContrapeso, a pesar del discurso triunfalista con el que se han
presentado en los medios de comunicación en las horas recientes (y que será
replicado hasta el cansancio por la opinocracia nacional en los titulares y
secciones de opinión del Universal, el Reforma, la mierda que usurpa el nombre
de Proceso, la agencia de montajes periodísticos de Loretito y su patiño,
Latinus, entre otros medios de mierda).
Discurso
que ya ha empezado a desquebrajarse, en, por ejemplo, las declaraciones del
gobernador de Guanajuato lamentando el incierto futuro de la “Alianza
Federalista” y la intención declarada de la entrante mayoría del congreso
tamaulipeco, para concretar la separación del cargo del gobernador PANista
Cabeza de Vaca, sujeto a un proceso legal por presunto lavado de dinero y
complicidad con cárteles del crimen organizado y arropado, hasta ahora, por el
aparataje estatal de su partido político.
Este
es el panorama de la “victoria” que algunas personalidades de la oposición,
dicen estar celebrando en la ciudad de México y otros muy contados estados del
país.
Mario
Stalin Rodríguez
Etiquetas: Apuntes sobre periodismo, Opinión, virus informáticos
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